Uno de los platos más simbólicos de la gastronomía extremeña son las migas. La tradición viene de cuando los pastores iban a pastar con sus cabras y ovejas y se quedaban a dormir en la sierra, por lo que no siempre tenían pan reciente y aprovechaban el pan duro para hacer las migas. Recetas de migas hay muchas, unas con huevo, otras con chorizo, pero nosotros os vamos a enseñar la receta transmitida durante años por nuestros queridos abuelos.
INGREDIENTES |
– Pan asentado (500g)
– 4 cucharadas soperas de aceite de oliva – 2 dientes de ajo – 1 pimiento rojo pequeño – Agua – Sal – 1 o 2 cucharadas de Pimentón de la Vera – Panceta |
ELABORACIÓN |
Picamos el pan asentado (es decir, de días anteriores que hemos ido dejando) en daditos pequeños. Calculamos más o menos la cantidad de pan echándolo en un bol o cazuela. En una sartén honda echamos el aceite de oliva y cuando esté caliente echamos los ajos picados en láminas y el pimiento en trozos. Cuando estén dorados, añadimos el pan y lo movemos con una cuchara de palo para que no se queme, pero que se impregne bien del aceite con los ajos y el pimiento. A su vez, a parte, podemos ir friendo la panceta. Después, añadimos un vasito de agua pequeño, removemos e incluimos el pimentón según nos guste y por último, la sal. Seguimos removiendo. Si nos gustan más mojadas, echaremos un poco más de agua. Para acabar, añadimos la panceta y mezclamos todo bien. |
EMPLATADO |
Sirve las migas en una cazuelita de barro y acompáñalas de un buen café, ¡es la tradición! |